ARTE, COMUNICACIÓN Y NEGOCIO

Guía definitiva para entender el funcionamiento de la industria audiovisual

La gestión de una obra cinematográfica o televisiva tiene tres pilares: producción, distribución y exhibición. Contemplar todos los pilares implica tener en mente unos procesos que no difieren -en la naturaleza de la acción- de abrir una empresa con la esperanza de llevarla hacia delante, enfocada a realizar proyectos artísticos, que comuniquen una historia y con perspectiva en la industria.

La industria del entretenimiento audiovisual funciona como cualquier empresa y de base sigue el mismo proceso, diseña, fabrica y comercializa bienes. En un primer momento esta productora falló al solo contemplar la cara artística del cine. Por ello se ha comprobado que la industria cultural no puede ser vista únicamente como un lienzo a través del cual comunicar historias, se debe considerar también como una empresa y los mecanismos empresariales del project managment son necesarios si se quiere hacer crecer un proyecto.

Precaución ante esta guía; hay una fina línea en la consideración del arte como industria que se está volviendo a cruzar y precedió a la Crisis del Cine de los años 50. Validar un proyecto únicamente en parámetros de rendimiento del mundo de la empresa (estudios de mercado, DAFO, plan financiero, etc.) crea obras técnicamente rentables, pero vacías, aunque veremos a continuación cómo contemplarlos ayudará a tener proyectos plenos.

Innovemos en un sector consolidado y estratégico

En el mundo audiovisual existe una doble dinámica de funcionamiento, el aprendizaje autodidacta del sector y el aprendizaje por emulación, adaptando el modus operandi de otras actividades empresariales. Cuando hablo del sector me refiero a los procesos de producción propios de la industria: características de los departamentos y fases de un proyecto audiovisual; al contemplar lo aprendido de otras industrias buscamos optimizar esos procesos y facilitar la creatividad en base a cubrir la organización temporal, de recursos humanos y técnicos para conseguir crear con la máxima calidad que esté a nuestro alcance.

Aprende a gestionar tu tiempo, coste y calidad

Conviértete en Productor Audiovisual

¿Cómo podemos aplicar los conocimientos del mundo de los negocios al mundo audiovisual?

---

Aprende a gestionar tu tiempo, coste y calidad

“La producción es la planificación, organización y control de un proyecto audiovisual, siguiendo los principios de la dirección o gestión de cualquier proyecto empresarial, es decir, consiguiendo el resultado óptimo a través del correcto equilibrio de las tres variables fundamentales: tiempo, coste y calidad. Así, el reto del productor no es otro que llevar a cabo un proyecto en el plazo previsto, dentro del presupuesto y con un determinado nivel de calidad.” Pardo, A. (2014). Fundamentos de producción y gestión de proyectos audiovisuales.

Lo primero es validar la idea de un proyecto cuestionándola y encontrando, entre nuestras respuestas, su público y nuestros objetivos con ella, desglosar la idea del proyecto en tareas pendientes, descomponerlas en tareas más pequeñas y trabajar por bloques de tiempo, hay que saber delegar y tener presente el coste (humano, material, de tiempo y dinero) para la realización del proyecto con la calidad que tienes como objetivo. También debes entender que la industria audiovisual es project based, todo funciona en base a prototipos, aunque cada proyecto tiene sus particularidades y la actividad de la empresa se estructura a partir de ello.

Considera, divide, gestiona, une y vencerás.

Conviértete en Productor/a Audiovisual

Se puede entender el trabajo de producción como un conjunto de acciones con el objetivo final de reunir en un lugar, fecha y hora, determinados objetos y personas para llevar a cabo algo y vivir de ello.

El mundo audiovisual es un sector con actividades sujetas a la incertidumbre, implicando un esfuerzo extra para intentar controlar todos los tempos de ejecución de todas las tareas y poder minimizar el riesgo de todo aquello que no depende del trabajo propio.

En mi primer proyecto, #lanostrapurga, pensé que con una historia, actores, una cámara y un micrófono tenía una película. Tardé años en acabarlo y el cortometraje resultante nunca tendrá ningún tipo de salida comercial, ¿por qué? Todo por no tener conciencia del acto de producir.

El control del tiempo de ejecución de las acciones que implican un proyecto es clave por la planificación de la producción. Hay que planificar teniendo en cuenta los diferentes escenarios y calcular sobre una base optimista, normal y pesimista, asignando a cada tarea la duración más probable según las circunstancias o aquello que determine la intuición y la experiencia.

Antes de empezar a rodar, el papel del productor y del mundo ejecutivo es concretar todo el trabajo de la producción y la comercialización del proyecto.

¿Cómo podemos aplicar los conocimientos del mundo de los negocios al mundo audiovisual?

En todo proyecto audiovisual hay que determinar el perfil y formato de la obra, de acuerdo con unos objetivos, teniendo en cuenta el punto de vista creativo, técnico, comercial, económico y legal. A partir de estos elementos se define la estrategia de producción y se realiza una secuencia de planificación alternativa.

En el caso de la ficción y el entretenimiento la industria pide la realización del dosier para iniciar la actividad, que puede ser sencillo o delimitar el recorrido del proyecto, de forma similar a aquello que en el mundo ejecutivo conoceríamos como plan de empresa. Herramientas empresariales como el Diagrama de Gantt son muy útiles en cualquier tipo de proyecto, el responsable adquiere una visión global y precisa de la planificación del proyecto: orden cronológico de las actividades, duración, fecha de inicio y fin, relaciones de dependencia (coordinación), etc. Además, el planteamiento empresarial de los proyectos audiovisuales facilitan observar los “cuellos de botella”, puntos de acumulación de actividad que pueden producirse.

¿Cómo empezar con un proyecto audiovisual?

El desarrollo es donde se concretan los objetivos del proyecto, se ubica la ficha técnica, abordando las características del proyecto como el título, el tagline, el género, el formato, la duración, el público objetivo o las plataformas de difusión; los rasgos característicos del mercado y la audiencia, la definición de los principales rasgos artísticos y creativos y las necesidades técnicas y de infraestructura.

Desarrollo del proyecto

En el mundo de las empresas ubicaríamos este punto como el diseño de producto y estudio previo de la viabilidad. Este punto engloba el trabajo de guionistas, la dirección, la producción, los diseñadores, animadores, abogados y responsables de finanzas de la obra audiovisual.

La suma de producción, distribución y explotación de un proyecto reflejan su cadena de valor. La etapa de producción adopta valor gracias al personal técnico, creativo, artístico, el equipo, las instalaciones y la financiación. Para considerar todas las implicaciones de los departamentos mencionados tendríamos la fase de Preproducción.

Preproducción

Se sitúa el desglose de las necesidades (técnicas y artísticas para la representación de la trama), la configuración y definición de las tareas del equipo técnico y artístico, el plan de producción, el desglose del guión, los permisos, derechos y aspectos legales a tener presente, las órdenes de rodaje, la escenografía, las fichas de personajes, la ficha estética de vestuario y maquillaje, el presupuesto y la financiación.

Se puede entender el trabajo de preproducción como un conjunto de acciones con el objetivo final de reunir en un lugar, fecha y hora, determinados objetos y personas para llevar a cabo algo que se nos ha ocurrido. Además, se deben delimitar todas las necesidades técnicas, visuales y sonoras que tendrá el proyecto en las salas de montaje.

Producción

Implica considerar todas las variables para poder llevar a cabo los rodajes en las mejores condiciones de trabajo posibles. Es el centro hacia donde concurren los recursos necesarios, humanos, técnicos y económicos, con una serie de industrias auxiliares implicadas, para rodar un proyecto.

Fase Balance

La obra audiovisual tiene que contar con una estrategia delimitada de lanzamiento, un plan de marketing y un planteamiento de cara a la explotación comercial.

Como conclusión, las nuevas estrategias actuales han permitido sinergias entre el mundo de la electrónica la informática, las telecomunicaciones, operadores de cable y satélite, plataformas digitales y productoras y distribuidoras de contenido; con el objetivo global de obtener el mayor control sobre la cadena de valor.

Por lo tanto, los elementos de un proyecto se tienen que entender como interconexionados y se tienen que formular desde la organización, temporalización y valoración de todos ellos como únicos y necesarios para poder explicar con la máxima calidad una historia con la pasión que la se inició. Las variables de tiempos, coste y calidad se tienen que poder valorar de forma industrial o el trabajo del artista nunca podrá posicionarse a ninguna pantalla menos la suya.

Se demuestra que el mundo empresarial se ha vinculado con la industria cultural audiovisual de tal manera que se crean relaciones de retroalimentación entre arte, creatividad y conocimientos sobre industrias basadas en proyectos y supervivencia en mercados con grandes barreras de entrada.